EL AGUA
El agua debe ser limpia, libre de impurezas, fresca, sin olor, color ni sabor, es decir, debe ser agua potable.
La cantidad de agua a utilizarse en las mezclas de concreto es muy importante, por lo que, debe ser cuidadosamente calculada.
Cuando la mezcla no es manejable y se incrementa descontroladamente la cantidad de agua, se pierden propiedades importantes del concreto (ver figura 27).
- No debe presentar espuma cuando se agita.
- No debe utilizarse en otra cosa antes de su empleo en la construcción.
- El agua de mar no es apropiada para la preparación del concreto debido a que las sales que contiene pueden corroer el fierro.